
Un mes después del terremoto en Myanmar: la emergencia continúa
Un mes después del devastador terremoto de magnitud 7,7 que sacudió Myanmar el 28 de marzo de 2025, la situación humanitaria sigue siendo crítica. Las regiones de Sagaing y Mandalay, las más afectadas, presentan un panorama desolador: cerca del 72% de sus habitantes aún no han recibido ningún tipo de ayuda humanitaria. Más de 42.000 personas continúan viviendo en refugios provisionales, expuestas a las inclemencias del tiempo y sin acceso adecuado a agua potable ni servicios básicos.

La llegada inminente de la temporada de lluvias agrava aún más la situación. Muchos de estos refugios no están preparados para soportar las fuertes precipitaciones, lo que aumenta el riesgo de inundaciones y enfermedades transmitidas por el agua, como el cólera y el dengue. Además, la destrucción de infraestructuras ha dejado a cientos de escuelas inoperativas, poniendo en peligro el inicio del próximo curso escolar en junio.
A pesar de las declaraciones de alto el fuego por parte de la junta militar y las fuerzas de la resistencia, los enfrentamientos continúan, dificultando las labores de rescate y la distribución de ayuda humanitaria. Las restricciones impuestas por los militares han impedido que muchos equipos de rescate lleguen a las zonas más necesitadas.
En este contexto, Colabora Birmania, ONG comprometida con el bienestar de las comunidades birmanas, intensifica sus esfuerzos para brindar apoyo a los afectados. Desde Mae Sot, trabajamos en colaboración con organizaciones locales para proporcionar ayuda de emergencia.
La magnitud de esta tragedia requiere una respuesta solidaria y coordinada. Invitamos a todos a unirse a nuestros esfuerzos para ayudar a las comunidades afectadas por el terremoto en Myanmar. Cada contribución, por pequeña que sea, puede marcar una gran diferencia en la vida de quienes más lo necesitan.